Se activa automáticamente tras haber completado la misión anterior, La batalla final, tras todas las escenas que verás. Tendrás que regresar a Gran Soren, así que hazlo y entra en el castillo. Una vez allí, ve a la Cámara del Duke y verás una escena. Tras esa escena tendrás que combatir contra el Duque hasta que su vida se reduzca a la mitad, momento en el que la batalla se parará y verás otra escena. Ahora tienes que escapar del castillo, aunque evidentemente los guardias no te lo pondrán fácil. Tras un rato escapando por las calles de la ciudad, verás una escena en la que empiezan a salir multitud de pajarracos por el suelo y tu irás de cabeza al Everfall, completando así esta misión; poco después se activará la de Sondea las profundidades.
Tras la misión anterior, Una cálida bienvenida, al recuperar el control después de tu caída en el Everfall, hablarás con Quince y se activará esta misión. La primera tarea será reunir 20 Piedras del despertar por la zona. Las podrás conseguir aleatoriamente en los cofres y/o luchando contra los monstruos, cada uno de ellos soltará unas 2 o 3 piedras al derrotarlo, aunque no serán precisamente enemigos débiles. Cuando tengas ya ten tu poder las 20 piedras, tendrás que entregárselas a Quince para que cree una falla por la que tendrás que meterte, aunque si todavía no estás preparado, puedes decirle que espere. En cualquier caso, cuando decidas continuar, ya habrás completado esta misión.
Después de haber completado la misión anterior, Sondea las profundidades, salta al vacío para entrar en la Cámara del Senescal. Acércate a la luz y verás una escena, tras la cual se habrá activado esta misión. Esquiva los ataques del Senescal y acércate a él, para con un par de golpes vaciarle por completo la barra de vida. Te seguirá hablando, así que espera a que termine y que comienza una escena (aunque intentes atacarle, no podrás hacer nada, sino esperas), entonces vuelve a repetir el mismo procedimiento de antes para vaciarle una segunda vez toda la barra de vida. Si te derrota durante esta fase, conseguirás el Logro/Trofeo “Servidumbre”. En la segunda fase, tendremos que elegir entre seguir hacia adelante para el enfrentamiento final o bien ir hacia atrás para terminar ya con esto y conseguir el Logro/Trofeo “Paz”. La tercera y última fase es el enfrentamiento definitivo contra el Senescal, estaréis vosotros dos y vuestros respectivos peones principales. Lo que tienes que hacer es acabar primero con el peón para después ir a por el Senescal o bien pasar de su peón y centrarte única y exclusivamente en el peón. Tras la batalla, verás una escena en la que te entregarán la espada Azote de Dios y al acabar, recibirás el nuevo objetivo de utilizar dicha espada. Pues bien, acércate al Senescal ahí mismo para primero preguntarle por las distintas opciones de conversación y luego utilizar la espada y matarlo. Habrás finalizado esta misión y activado la última de la historia principal, El gran más allá.
Se activará automáticamente al finalizar la misión anterior, Juicio final. Vive como Senescal... ese es el objetivo que te marcan en el juego. Pues bien, si te sientas en el trono, podrás volver a Gransys, pero en modo “fantasma”. Podrás inspeccionar todas las zonas que quieras, pero por simple curiosidad, por que apenas podrás hacer nada. Lo único que puedes hacer y que seguramente ya se te haya pasado por la cabeza, será matarte con el Azote de Dios, por que sino seguirás eternamente en esa forma sin poder hacer nada. Con eso no solo habrás completado el juego, sino que también se activará el Nuevo Juego +.
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